Hace unas semanas, se publicaba una noticia en algunos portales de Internet (resultando curioso observar la poca repercusión que ha tenido en medios de comunicación nacionales esta noticia).
Holanda sigue la estela dejada por Chile al aprobar, hace escasamente un año, la neutralidad de la red por ley, a raíz de un cuantioso número de quejas surgidas de la imposición por compañías holandesas, de un pago extra para utilizar el famoso Skype.
Para los que anden un poco perdidos, se lo explicaremos en términos profanos: Un problema que muchos usuarios de Internet y redes de comunicación veían, es el que generan los medios de transmisión de INFORMACIÓN a través de las redes (tv por cable, compañías telefónicas, etc.) al interferir en la libertad de circulación de la INFORMACIÓN que ellos veían oportuna o la restricción de acceso a contenido, sitios y plataformas ya fuese total (bloqueando relaciones con la competencia) o parcialmente (liberando dicho acceso solamente mediante un pago).
Así, Holanda en calidad de libertina (para unos) y de libertaria (para otros) se ha ganado aplausos y abucheos, al ir en dirección contrapuesta a las cada vez más frecuentes restricciones impuestas a Internet por los compis del G8 ('Ley Sarkozy & co.) y por los que hacen méritos para entrar en el club (Ley Sinde española).
Y ¿Por qué no hacemos cosas como estas en España? Fácil, vivimos en un sistema bipartidista que sigue la tendencia neoliberalista ¿Porque somos Europeos no? Y cual mujer de compañía, preferimos agacharnos para estar toda la vida chupándosela a nuestra querida CEE, y sin darnos cuenta los lobbies de la comunicación no paran de metérnosla por el culo, y la tiene más gorda de lo que nuestros queridos políticos piensan.
Pronto más sobre el negocio de los "contenidos"
a ver si paramos la ley Sinde... aunque de momento aqui en España los jefes de la SGAE a la carcel por ladrones!!! los jueces han tardao muchos años en averiguar lo que todos sabiamos...
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ResponderEliminarDe nada sirve que metan en la cárcel a los peces gordos de la SGAE, cuando por ejemplo el presidente sigue en su cargo aunque no pueda tomar decisiones, es un tanto indignante, de todas formas los "derechos de autor" van a seguir cobrándolos igual o peor.
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